Meritorio cuarto puesto el que ha logrado en el World Challenger de boccia en Heraklion (Grecia) la pareja española BC3 (deportistas con limitaciones de movimiento muy severas en las cuatro extremidades y que para lanzar se sirven de una rampa o canaleta, y también requieren la ayuda de un asistente). Alejandro Morillas y Laura Utrero, que debutaban a nivel internacional como dupla, se han quedado a las puertas de las medallas.
La nueva pareja formada por el madrileño y la extremeña, una apuesta en el relevo generacional de la Federación Española de Deportes de Personas con Parálisis Cerebral y Daño Cerebral Adquirido, ha firmado una buena actuación en el torneo celebrado en territorio heleno. En la pool se estrenaron con una victoria ajustada por 5-4 frente a los eslovacos Luba Skvarnova y Boris Klohna, este último, medallista de plata en la prueba individual.
En el segundo partido de la fase de grupos cedieron por 2-5 ante los italianos Giulia Marchisio y Gabriele Zendron, y tampoco pudieron sorprender en semifinales a los griegos Grigorios Polychronidis y Anna Ntenta (0-5), a la postre campeones. En el encuentro por el bronce, los españoles perdieron por 1-5 frente a los suecos Maria Bjurstrom y Christoffer Hagdahl.
“Era la primera vez que competían juntos, llevan poco tiempo entrenando y este campeonato servía para tomar contacto con la competición internacional y ver en qué momento nos encontrábamos. Haber hecho un cuarto puesto es un resultado maravilloso y muy esperanzadores de cara a seguir trabajando con una pareja muy joven”, ha comentado la seleccionadora nacional, María Valdés.
España se marcha de la capital de la isla griega de Creta con una medalla, ya que Amagoia Arrieta se colgó la plata en BC1 (lanzan con manos o pies y precisan asistente). La guipuzcoana, vigente campeona de Europa, apura sus opciones para lograr el billete para los Juegos Paralímpicos de París 2024.
